Patología y cirugía de Oídos

La patología de oídos es muy frecuente en niños y adultos, afectando su calidad de vida. existen soluciones mediante microcirugías o con terapias medicas que pueden modificar esta condición.

NUESTRAS ESPECIALIDADES

El oído es una estructura compleja. Sus alteraciones pueden englobarse en dos grupos muy característicos:

Patologías auditivas externas, la membrana timpánica, la cavidad del oído medio y aquellas que afectan la cadena de huesecillos.

Órganos neurales sensoriales, como la cóclea o caracol y el nervio que conduce este sonido desde la cóclea a la corteza auditiva del cerebro.

Si usted o un familiar cree que tiene alguna problema auditivo, acérquese a CEA.

ADULTOS

La deficiencia auditiva uni o bilateral suele manifestarse con alta prevalencia ya desde los 40 años de edad. A modo de ejemplo, el 77.8 % de la población de adultos mayores en nuestro país presenta algún grado de pérdida auditiva.

La pérdida auditiva o hipoacusia en el adulto repercute principalmente en el ámbito laboral, social y emocional, ya que esta deficiencia dificulta la comunicación con terceros, generando que el paciente se frustre en sus logros laborales, se aísle de su entorno social y desarrolle caracteres agresivos o rasgos depresivos.

En su diagnóstico se pueden emplear los siguientes exámenes:

  • Audiometría Tonal
  • Logoaudiometría
  • Audiometría a Campo Libre con y sin Audífonos
  • Impedanciometría con estudio de función de la Trompa de Eustaquio
  • Potenciales Evocados Auditivos de Tronco Cerebral
  • Electrococleografía.

Al igual que en los pacientes pediátricos, su tratamiento se basa en el uso de dispositivos de ayudas auditivas, como audífonos o implantes cocleares, implantes de oído medio o implantes osteointegrados, según corresponda.

NIÑOS

2 a 3 de cada 1000 recién nacidos presentan alteraciones auditivas significativas en sus primeros años de vida.

El diagnóstico de hipoacusia debe realizarse lo más precozmente posible, ya que su demora genera diversos grados de daño en la corteza cerebral auditiva del niño, dificultando o impidiendo la adquisición del lenguaje y el habla y, en consecuencia, dificultando su integración social y escolar.

Su diagnóstico se realiza a través de diversos exámenes como:

  • Otoemisiones Acústicas
  • Potenciales Evocados Auditivos de Tronco Cerebral inalámbricos (no requieren de sedación)
  • Potenciales Evocados Auditivos de Estado Estable
  • Impedanciometría con estudio de función tubaria
  • Audiometrías Tonales
  • Audiometrías con Refuerzo Visual y de Juego
  • Audiometría a Campo Libre.

Su terapia se basa en el uso de dispositivos de ayuda auditiva, tales como audífonos, implantes cocleares, implantes de oído medio o implantes osteointegrados según corresponda, asociando una posterior terapia de rehabilitación de su lenguaje apropiada.